Lo femenino y lo masculino en el Shabat, según la Kabalá

Lo femenino y lo masculino en el Shabat, según la Kabalá

¿Qué nos dicen las sefirot, los atributos y emanaciones de D’s, del Shabat y de nuestro lugar en el mundo?

La sefirá conocida como Maljut (Reino) representa al Shabat, femenino y armonioso, que refleja representa el estado del Ser.
Lo femenino y lo masculino en el Shabat, según la Kabalá 1
En términos místicos, es el receptor final de la información proveniente del mundo de arriba y, al mismo tiempo, el primer proveedor de información al mundo de abajo, actuando como una forma de conector místico entre los mundos y las sefirot.

La conexión con Dís y el cumplimiento de sus mitzvot se llama en la Kabalá “elevar las aguas femeninas”. 

Las “aguas femeninas” viajan hacia arriba y se encuentran con las “aguas masculinas”, reconectando así los atributos Divinos.

Al observar la prohibición de trabajar en sábado, así como el mandamiento positivo de conectarnos con D’s, nos reconectamos con Él y reparamos las conexiones entre las sefirot, replicando el estado perfecto del mundo antes de la transgresión de Adán y Eva.

Es por esta razón que “Lejá Dodi”, la canción litúrgica tradicional recitada en los servicios del viernes por la noche, alude a la sefirá masculina -conocida como Yesod- que conoce a su novia, la reina Shabat (la sefirá de Maljut), y por lo tanto realiza el acople y conexión entre lo masculino y lo femenino.

Bereshit (Génesis) 2:3 dice: “Y bendijo Dios el día séptimo y lo declaró santo, porque en él descansó Dios de toda la obra de creación que había hecho”.

“La palabra hebrea para bendición es “brajá”, que proviene de la misma raíz hebrea que la palabra “bereija” o “canal de agua”.  La bendición de Dios del sábado significa que todos los canales espirituales están abiertos en ese momento.