La “hormona del amor” también aumenta la agresividad, dicen científicos israelíes

La "hormona del amor" también aumenta la agresividad, dicen científicos israelíes

Promocionada como el afrodisíaco ideal, la oxitocina también puede amplificar tendencias mucho menos agradables, según un estudio del Instituto Weizmann

Un estudio reciente realizado por científicos israelíes encontró que la oxitocina, también llamada “la hormona del amor”, no solo actúa como “cemento” social y se relaciona con los orgasmos, sino que también aumenta la agresividad.

La oxitocina es una sustancia producida en el cerebro que se libera al máximo durante las primeras etapas de una relación sentimental.

Por ese motivo ha estado en las primeras planas durante la última década, y un estudio llegó incluso a sugerir que los aerosoles de oxitocina podrían mejorar las relaciones románticas y ayudar a mejorar los vínculos.

Obviamente, los aerosoles de oxitocina se volvieron un éxito de ventas online, prometiendo mejorar la vida amorosa y estimular las relaciones y las interacciones sociales (sin aportar demasiadas pruebas científicas).

Por el lado de la ciencia más seria, la oxitocina también ha despertado el interés entre algunos investigadores por sus potenciales terapéuticos para una variedad de cuadros, que incluyen la ansiedad social, el autismo y la esquizofrenia.

Pero recientemente los científicos han comenzado a prestar más atención a sus posibles efectos indeseables. Así es que los resultados de un reciente estudio del Instituto Científico Weizmann sugieren  que aumentar las concentraciones de oxitocina podría, hacer más mal que bien.

Los científicos hicieron una semana de “Gran Hermano” de 44 ratones que competían por comida, cuyas interacciones sociales fueron filmadas y analizadas en su totalidad.

Cinco veces al día, los investigadores usaban dispositivos especiales de fibra óptica montados en las cabezas de los ratones para alterar la función cerebral de algunos de los animales.

Al activar neuronas específicas, podrían también aumentar los niveles de oxitocina. Los que no recibieron el refuerzo de oxitocina mantuvieron un comportamiento relativamente constante, mientras que los que lo recibieron experimentaron cambios.

Al principio, la hormona actuó realmente actuó como el favorecedor social que generalmente se cree que es. Los ratones residentes atacaron menos a sus vecinos después del subidón de oxitocina, y también interactuaron más entre ellos.

Pero el problema es que el efecto no era constante: el primer día la interacción social aumentó y los ratones pasaron más tiempo juntos, pero el segundo día se volvieron más agresivos.
Los autores del estudio postulan que la oxitocina no es una hormona necesariamente asociada con el amor, sino que hace que personas y animales reaccionen más intensamente a las situaciones sociales, para bien o para mal.

La oxitocina, entonces, no nos encamina en una dirección determinada, sino que esta depende de la situación social: cuando la oxitocina aumenta, las señales sociales de cualquier signo se ven “amplificadas”.

Aunque se necesita más investigación sobre el tema, este estudio obliga a poner entre signos de interrogación la administración terapéutica de oxitocina en los seres humanos: si hace lo mismo que en los ratones, y se usa para tratar trastornos sociales, estos podrían empeorar en lugar de mejorar.

Referencias:

Anpilov, S., et al. (2020) Wireless Optogenetic Stimulation of Oxytocin Neurons in a Semi-natural Setup Dynamically Elevates Both Pro-social and Agonistic Behaviors, Neuron. doi.org/10.1016/j.neuron.2020.05.028

¿Han Solo también hizo el bar mitzva?

Pero Alden Ehrenreich no es la única referencia “de la cole” del emblemático personaje de la Guerra de las Galaxias: 1- Harrison Ford, el Han Solo original, es hijo de padre irlandés y madre judía. Su cita más famosa al respecto: “Como hombre, siempre me he sentido irlandés; como actor, siempre me he sentido judío”. Para interpretaciones de esta frase, por favor dirigirse a su psicoanalista amigo… 🙂 2- El casting para el papel de Han Solo fue larguísimo, y al final quedaron seleccionados 12 actores, cuatro de ellos judíos. Además de Ehrenreich, Logan Lerman (“Fury,”“The Perks of Being a Wallflower”), Dave Franco (el hermano de James Franco, que ahora es una estrella por derecho propio) Ansel Elgort (el protagonista de la película de acción” Baby Driver “, cuya abuela no judía ayudara a judíos noruegos a escapar de los nazis) y Emory Cohen (coprotagonista de “Brooklyn” con Saoirse Ronan). 3- El guión fue escrito por un dúo de padre e hijo: Lawrence y Jonathan Kasdan.  Lawrence co-escribió dos de las películas originales de “Star Wars”: “El Imperio Contraataca” y “El Retorno del Jedi”, y recibió un premio del Festival de Cine Judío de Atlanta en 2016. Jonathan, de 38 años, ha actuado en pequeños papeles y es su primer participación de importancia en un guión.

Una idea para Twitter

¿Cuánto tiempo pasará desde el estreno de “Solo” para que aparezca alguien en Argentina diciendo que “tuvo algo” con Alden Ehrenreich mientras filmaba “Tetro” en Buenos Aires…? ¡Se aceptan apuestas! 😉