La patria ancestral

Israel, según César Tiempo

Israel, según César Tiempo

Dijo el Señor: –está en el Génesis-~
Sea la luz. Y la luz fue.
La luz bajó de las alturas
como la voz de Aquel que es.
La tierra es nuestra, el cielo es nuestro.
Tierra de cielo es Israel.

Dios se cansó de reinar solo
sobre la inmensa Iobreguez.
Modeló al pájaro y la Estrella,
modeló al hombre y la mujer.
La tierra es nuestra, el cielo es nuestro.
Tierra de cielo es Israel.

Y ya vencida su apantropia,
junto a la encina de Moré
aparecióse a Abram y díjolez
este país de leche y miel
es para tí y tus descendientes.
Era Canaán y es lsrael.

Jacob combate con el Angel
y Dios le infunde fuerza y fe.
Vence y ya no es “el que suplanta”
sino el Príncipe del Sumo Rey:
Israel es Príncipe Celeste.
Tierra de cielo es Israel.

Con mis columnas de humo y fuego
por el desierto te guiaré;
libra a Israel del cautiverio
ordena el Eterno a Moisés.
Y hacia Canaán marcha la tribu.
La libertad es Israel.

Aarón jugó con el milagro,
venció a Menefta y a Cofé,
hizo correr ríos de llamas,
atrapó a la luna en su red.
La taumaturgia es el oficio
de los pastores de Israel.

Después del paso del Mar Rojo
bailó la hermana de Moisés.
David danzó delante el Arca
al son del sistro y del rabel.
Bailan los reyes, baila el pueblo.
El cielo está bajo sus pies.

Ponen los ojos en la altura
los que edifican la Babel
edificamos en la arena
pero en las montañas también.
Nos destruyeron nuestros templos
los erigimos otra vez.

Por sus raíces vale el hombre
y la sangre por su vaivén.
La noche vale por el día
y el hoy vale por el ayer.
Por el camino del retorno
volvemos a Jerusalén.

Los macabeos de hoy lograron
que lo que fue volviera a ser.
Tallada en trueno y en coraje
se alza Israel eterna y fiel.
Inevitable como Dios
por los siglos de los siglos. ¡Amén!

Publicado originalmente en Herencia Judía No 13 (segunda serie)