Share on facebook
Share on google
Share on twitter
Share on whatsapp

Groucho Marx te enseña cómo es la vida

Groucho Marx te enseña cómo es la vida

Una colección de "grouchismos", frases de Groucho Marx que primero te hacen reír... y cuando lo piensas bien te dan ganas de llorar


Groucho y el prójimo

– Él puede parecer un idiota y actuar como un idiota. Pero no se deje engañar. Es realmente un idiota.

– Nunca olvido una cara. Pero en su caso, haré gustoso una excepción.

– Claro que lo entiendo. Incluso un niño de cinco años podría entenderlo. ¡Que me traigan un niño de cinco años!

– Desde el momento en que tomé su libro me caí al suelo rodando de risa. Algún día espero leerlo.

– – He pasado una noche estupenda. Pero no ha sido esta.

– No puedo decir que no estoy en desacuerdo contigo.

– La próxima vez que lo vea, recuérdeme no saludarlo

Groucho, las mujeres, y algún que otro machirulismo

– Recordad que estamos luchando por el honor de esa mujer, lo que probablemente es mas de lo que ella hizo jamás.

– El matrimonio es una gran institución. Por supuesto, si te gusta vivir en una institución.

– ¿Que por que estaba yo con esa mujer? Porque me recuerda a ti. De hecho, me recuerda a ti mas que tu.

– La política no hace extraños compañeros de cama. El matrimonio si.

– Soy tan viejo que recuerdo a Doris Day antes de que fuera virgen.

– Detrás de cada gran hombre hay una gran mujer. Detrás de ella, esta su esposa.

– El matrimonio es la principal causa de divorcio. 

– Nunca voy a ver películas donde el pecho del héroe es mayor que el de la heroína

– ¿Quiere usted casarse conmigo? ¿Es usted rica? Conteste primero a la segunda pregunta

–  “Hasta luego cariño… ¡Caramba!, la cuenta de la cena es carísima … ¡Es un escándalo!— ¡Yo que tú no la pagaría! (“Una noche en la ópera”)

– “Señorita, envíe un ramo de rosas rojas y escriba ‘Te quiero” al dorso de la cuenta (“Un día en las carreras”)

– “El verdadero amor sólo se presenta una vez en la vida… y luego ya no hay quien se lo quite de encima” (“Servicio de hotel”)

– “¿Por qué y cómo ha llegado usted a tener veinte hijos en su matrimonio?”.

“Amo a mi marido”.

“A mí también me gusta mucho mi puro, pero de vez en cuando me lo saco de la boca” (“Apueste su vida”, su programa de TV)

– Siempre me casó un juez: debí haber exigido un jurado

Siguiente: Groucho, política y posverdad